jueves, 22 de enero de 2009

5 DIFERENCIAS ENTRE ORLANDO E IVAN


Vuelvo a hacer una de las mias "robando un post" y hago mias la palabras de Marulo ,pero no olvideis que yo no soy la autora que es MARULO
1.- Orlando sabe escuchar e Iván sólo se escucha a si mismo
Que Orlando sabe escuchar lo reconoce incluso el propio Iván mientras que éste es feliz, sobre todo, oyéndose en el eco de sus peroratas. Baltasar Gracián aconseja “no escucharse uno mismo” en uno de los 300 aforismos de su libro, “El arte de la prudencia” y viene a decir:
“… Querer hablar y oírse no sale bien. Si hablar a solas es cosa de locos, lo es mucho más escucharse delante de otros. Es defecto común hablar con muletillas como (¿ me comprendes?) y el (¿eh?) que tan inútilmente cansa a los que escuchan. Tras cada frase quieren oír la aprobación o lisonja, olvidando el buen sentido. También los hinchados de orgullo hablan con eco. Su conversación tiene una presunción excesiva por lo que a cada palabra precisan del molesto socorro del necio (¡bien dicho!)”

2.- Orlando se ganó el respeto de todos sus compañeros, incluso la cordialidad distante pero civilizada de Mirentxu, sin la necesidad de broncas, conflictos y discusiones estériles.
En las contadas ocasiones en que tuvo roces con sus compañeros supo decir con claridad lo que no le gustaba o parecía mal, siempre con las palabras y el tono adecuado, serio y cordial, procurando no agredir con gestos desafiantes ni palabras gruesas.
De Iván, evidentemente, no se puede decir lo mismo.

3.- Orlando es hombre de pocas palabras, bueno yo diría que de palabras exactas. Habla lo justo, pero lo que dice siempre es coherente y normalmente atinado mientras que Iván se pierde en mis explicaciones, sus eternos bucles insufribles para nada.

4.- El lenguaje gestual de Orlando es siempre jovial y cercano, incita a la confianza, da su sitio al interlocutor, y no pide adhesiones inquebrantables a sus argumentos. Te deja ser tu mismo sin imponer su criterio. Su arma es la sonrisa y salvo excepciones, nunca está a la defensiva.
Iván por el contrario es agresivo y arrogante en sus gestos, suele señalarte cuando habla o discute, alzando la mano a la altura o por encima de la cara de su interlocutor. Adelanta la cabeza y frunce el morro en una actitud guerrera que intimida y avasalla. Es categórico y radical en sus sentencias y en sus respuestas humillando o haciendo de menos a su contrincante (Punto pelota, fuchi fuchi, reventao, etc) e hiriéndolos gratuitamente.

5.- Orlando sabe divertirse, vivir las bromas pero sin el punto sarcástico y en ocasiones excesivo de Iván.

Parafraseando la canción navideña de Luis Aguilé y con su musiquilla de fondo…
“Por eso y por muchas cosas más… esta noche ORLANDO debe ganar”

1 comentario:

Anónimo dijo...

Triss, hoy es el fin... ='(

Solo nos queda esperar y rezar mucho para que gane nuestro Orlando e Iván se enfurezca y demuestre la mierda que es...
Y salga en 2º puesto ante el asombro de los ivanistas. Eso seria lo ideal. Publico el texto en nuestro blog, aun podemos...

ORLANDO GANADORRRRRRRR